En el artículo 163 del texto se establece que "no será punible el médico quien, por voluntad expresa de una persona hábil por la ley, sea requerido para poner fin a su vida, por procedimientos científicos, siempre y cuando: Conste por escrito de cualquier forma la expresión clara y libre de su voluntad; se trate de persona mayor de edad o emancipado; la persona solicitante presente una enfermedad terminal, incurable, en fase terminal constatada y ratificada en condiciones clínicas y la opinión manifestada por dos médicos ajenos a la relación médico-paciente; cuando la persona solicitante esté mentalmente incapacitada, o se haya diagnosticado la muerte cerebral por metodología científica prevaleciente, se tomará como expresión de voluntad la otorgada por documento público ante autoridad competente en oportunidad anterior al suceso que lo incapacite y en su defecto por los dos familiares más allegados".
El derecho del paciente se encuentra restringido por el requisito de escribir un documento, que debe ser renovado de tiempo en tiempo de acuerdo con diversas estipulaciones para que conserve su validez. Todo paciente crítico hospitalizado sin un documento “Esta es mi Voluntad o Testamento Vital”, ajustado a la ley, corre el riesgo de que lo sometan a tratamientos inútiles que prolongan su proceso de morir.
Según la inclusión de la eutanasia en el Código Orgánico Penal Venezolano traería como consecuencia que un paciente que sufra una enfermedad terminal podrá solicitarle a los médicos que lo tratan ayuda para acelerar su muerte, y éstos podrán conceder la petición sin que ello pueda acarrearles ninguna consecuencia legal.
La eutanasia sería una práctica ilícita siempre y cuando se apruebe el proyecto del Código Orgánico Penal que elaboró de forma específica la Comisión de Política Interior de la Asamblea Nacional (AN) el 11 de octubre, presidida por el diputado del PSUV Tulio Jiménez, y apoyado por su colega Iris Varela.
La propuesta ampara al profesional de la salud al momento de poner fin a la vida de un paciente con una enfermedad terminal, si éste lo desea. La preocupación principal de cualquier legislación sobre la muerte natural debería ser afirmada, de manera práctica, el derecho natural de cualquier persona a no ser sometida a tratamientos inútiles.
Aunado a esto, otra investigación publicada en la página web sehablade.com menciona los países en que está legalizada la eutanasia, para así comprender de manera general la práctica de la misma, siendo éste un método de desconexión de aparatos a los individuos que padecen de enfermedades terminales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario